Y otras hiervas que suelo rumiar
ya te la voy a cantar
ya te la voy a cantar
yo soy como soy
Silvio Rodríguez
Silvio Rodríguez
S. Barrio Healey
Si preguntamos al hombre común, a la gente de la calle, o a un científico objetivo, ¿qué será más tóxico: una Coca Cola o un mate de coca?, pocos podrían objetar que obtenemos una unánime respuesta. ¿No es acaso irónico que las instituciones que velan por nuestra salud con alevosía le hagan la vida imposible a la hoja de coca, pero parejamente permitan que la sociedad consuma todo género de comidas peligrosas, gaseosas, salchipapas, grasas hidrogenadas, comidas rápidas, aflatoxinas, edulcorantes y metales pesados, entre otros?
DEVIDA y CEDRO desean un país sano, fuerte y libre de la toxicomanía de la hoja de coca, pero me pregunto, ¿y qué sucede con la ubicuidad de las toxicomanías legales restantes con las que se enferma a la sociedad? Comparemos las heridas sociales que se desprenden del mundo del alcohol y pongámoslo en perspectiva con el uso tradicional de la hoja de coca. ¿Cuáles son los alimentos legítimamente imputables de trastornar y amenazar la salud de nuestra sociedad?
El Perú está entre los tres países con mayor desnutrición en Latinoamérica. Aun cuando tiene los recursos más pujantes para una óptima alimentación, como la anchoveta, el tarwi, la kiwicha, el camu camu, el sacha inchi, la quinua y, naturalmente, también la hoja de coca.
Cual modernos fariseos de terno y corbata, hay hombres que hablan de ética y moral y nos quieren proteger de la blasfemia de la coca, pero comenten el error de menospreciar la inteligencia del pueblo, y de ignorar su historia. Después de escucharlos no soy el único que se queda atónito por su capacidad de deformar la información, por su deseo de aterrorizar a la población, cuando llegan a declarar que la coca puede incluso ser mortal. Al escuchar sus explicaciones cualquier persona que haya tenido algo de formación médica, nutricional, o tan solo sentido común, se queda con la mandíbula colgada.
La estrategia de «miente, que algo queda» ha funcionado por varios años, pero ahora la población, con más madurez, más alerta, más inquisitiva y menos ingenua, ya no cae en el juego, ni se deja llevar por la corriente. Está constatado que cada día son miles de personas que en silencio conocen y aprenden la verdad de la coca, a pesar de la persistente campaña de difamación en su contra. Por desgracia y por necesidad, en nuestro país hemos aprendido a desconfiar de los volubles medios de comunicación y del comercio de la información.
1. ALCALOIDES TÓXICOS
Se repite que la coca tiene alcaloides tóxicos, pero no se aclara a qué efectos tóxicos exactamente se está aludiendo. Y, mucho menos, en cuáles estudios esto se ha evidenciado.
Si bien la hoja de coca contiene 1% de cocaína, además de otros 13 alcaloides, por acción de la saliva y de los jugos gástricos e intestinales la cocaína se degrada en ecgonina y benzoilacgonina. Ambos metabolitos se comportan de una manera singular y su efecto fisiológico es diferente al de la cocaína; son 80 veces más inocuos que el clorhidrato de cocaína (ver Burchard). Para que la cocaína actúe como un narcótico se debe inyectar a la vena o esnifar. El consumo oral de los alcaloides mencionados está asociado más bien a diversos beneficios a la salud, que pueden ser aprovechados por la población en general. El efecto fisiológico de la cocaína no es semejante ni comparable al de la hoja de coca, y todas las investigaciones respecto a la cocaína no son equivalentes al consumo oral de la hoja de coca.
2. CALCIO NO ASIMILABLE
La coca contiene muchos minerales. Destaca en particular el calcio, con una insuperable concentración de dicho mineral. Para determinar la biodisponibildad del calcio que contiene un alimento se necesita tener en cuenta los siguientes criterios:
Correcta proporción entre calcio y fósforo
Ejercicio
Niveles adecuados de acidez estomacal
Presencia de ciertos nutrientes: K, Mg, Zn, B
Vitaminas D y K
Bajo estos criterios, la coca en teoría demuestra ser un buen candidato como rica fuente de calcio, naturalmente es necesario hacer las investigaciones correspondientes.
Aun cuando se ha expuesto que la hoja de coca tiene una alta concentración de calcio, sin que se conozca fuente que la supere en este mineral (2097 mg de calcio por 100 g de hoja de coca), y aun cuando sabemos que su calcio tiene buena biodisponibilidad para las personas con osteoporosis, quienes se oponen a su consumo argumentan que el calcio de la coca es inservible porque no contiene vitamina D. Veamos las fuentes de la vitamina D.
Yema de un huevo 20 ui de vit. D2
Productos lácteos enriquecidos (un vaso) 60 a 100 ui de D3 o D2
Aceite de hígado de bacalao (1 cda.) 1360 ui de vit. D3
Exposición al sol (tez clara, 20 min.) 10,000 ui de D3
DEVIDA y CEDRO desean un país sano, fuerte y libre de la toxicomanía de la hoja de coca, pero me pregunto, ¿y qué sucede con la ubicuidad de las toxicomanías legales restantes con las que se enferma a la sociedad? Comparemos las heridas sociales que se desprenden del mundo del alcohol y pongámoslo en perspectiva con el uso tradicional de la hoja de coca. ¿Cuáles son los alimentos legítimamente imputables de trastornar y amenazar la salud de nuestra sociedad?
El Perú está entre los tres países con mayor desnutrición en Latinoamérica. Aun cuando tiene los recursos más pujantes para una óptima alimentación, como la anchoveta, el tarwi, la kiwicha, el camu camu, el sacha inchi, la quinua y, naturalmente, también la hoja de coca.
Cual modernos fariseos de terno y corbata, hay hombres que hablan de ética y moral y nos quieren proteger de la blasfemia de la coca, pero comenten el error de menospreciar la inteligencia del pueblo, y de ignorar su historia. Después de escucharlos no soy el único que se queda atónito por su capacidad de deformar la información, por su deseo de aterrorizar a la población, cuando llegan a declarar que la coca puede incluso ser mortal. Al escuchar sus explicaciones cualquier persona que haya tenido algo de formación médica, nutricional, o tan solo sentido común, se queda con la mandíbula colgada.
La estrategia de «miente, que algo queda» ha funcionado por varios años, pero ahora la población, con más madurez, más alerta, más inquisitiva y menos ingenua, ya no cae en el juego, ni se deja llevar por la corriente. Está constatado que cada día son miles de personas que en silencio conocen y aprenden la verdad de la coca, a pesar de la persistente campaña de difamación en su contra. Por desgracia y por necesidad, en nuestro país hemos aprendido a desconfiar de los volubles medios de comunicación y del comercio de la información.
1. ALCALOIDES TÓXICOS
Se repite que la coca tiene alcaloides tóxicos, pero no se aclara a qué efectos tóxicos exactamente se está aludiendo. Y, mucho menos, en cuáles estudios esto se ha evidenciado.
Si bien la hoja de coca contiene 1% de cocaína, además de otros 13 alcaloides, por acción de la saliva y de los jugos gástricos e intestinales la cocaína se degrada en ecgonina y benzoilacgonina. Ambos metabolitos se comportan de una manera singular y su efecto fisiológico es diferente al de la cocaína; son 80 veces más inocuos que el clorhidrato de cocaína (ver Burchard). Para que la cocaína actúe como un narcótico se debe inyectar a la vena o esnifar. El consumo oral de los alcaloides mencionados está asociado más bien a diversos beneficios a la salud, que pueden ser aprovechados por la población en general. El efecto fisiológico de la cocaína no es semejante ni comparable al de la hoja de coca, y todas las investigaciones respecto a la cocaína no son equivalentes al consumo oral de la hoja de coca.
2. CALCIO NO ASIMILABLE
La coca contiene muchos minerales. Destaca en particular el calcio, con una insuperable concentración de dicho mineral. Para determinar la biodisponibildad del calcio que contiene un alimento se necesita tener en cuenta los siguientes criterios:
Correcta proporción entre calcio y fósforo
Ejercicio
Niveles adecuados de acidez estomacal
Presencia de ciertos nutrientes: K, Mg, Zn, B
Vitaminas D y K
Bajo estos criterios, la coca en teoría demuestra ser un buen candidato como rica fuente de calcio, naturalmente es necesario hacer las investigaciones correspondientes.
Aun cuando se ha expuesto que la hoja de coca tiene una alta concentración de calcio, sin que se conozca fuente que la supere en este mineral (2097 mg de calcio por 100 g de hoja de coca), y aun cuando sabemos que su calcio tiene buena biodisponibilidad para las personas con osteoporosis, quienes se oponen a su consumo argumentan que el calcio de la coca es inservible porque no contiene vitamina D. Veamos las fuentes de la vitamina D.
Yema de un huevo 20 ui de vit. D2
Productos lácteos enriquecidos (un vaso) 60 a 100 ui de D3 o D2
Aceite de hígado de bacalao (1 cda.) 1360 ui de vit. D3
Exposición al sol (tez clara, 20 min.) 10,000 ui de D3
3. PRESENCIA DE OXALATOS
El último argumento en contra de la hoja de coca es el de la presencia de oxalatos que la vuelven tóxica e impiden que se absorba su calcio. Si bien es cierto que el oxalato inhibe al calcio, no tenemos información sobre el contenido de oxalatos en la hoja de coca.
Curiosamente, la espinaca es una verdura con la más alta concentración de oxalatos y nadie ha objetado su consumo; mas aún, la sociedad lo promueve y lo tiene como un aureolado nutriente, tan solo está contraindicado su consumo en casos de cálculos renales por oxalato de calcio. Sin embargo, se asume que la hoja de coca tiene oxalatos, y se le pone la lupa de aumento en toda la prensa.
Más que los oxalatos son los fitatos, que son compuestos fosfatados, los que inhiben la asimilación de calcio. Los fitatos son la principal forma de almacenar fósforo en los tejidos vegetales; están presentes en muchas verduras verdes y su presencia inhibe la asimilación de calcio en un 20% como máximo. El alimento con mayor concentración de fitatos, o también llamado ácido fitico, es la soya con un 2,9% de su peso en seco.
En el caso de que la hoja de coca tuviera una significativa concentración de fitatos, dado su alto contenido de calcio, aún quedaríamos con el 80% restante de calcio disponible. El 80% de 2097 mg de calcio de la coca es 1677,6 mg; todavía con este fuerte descuento, aún nadie supera a la coca en concentración de calcio.
Curiosamente, los fitatos para algunos son considerados como fitonutrientes, debido a su efecto antioxidante, que puede prevenir el cáncer de colon y reduce el estrés oxidativo en el tracto intestinal. Muchos investigadores ahora razonan que el contenido de fitatos en la fibra de legumbres y granos es uno de los ingredientes responsables en la prevención del cáncer de colon.
La cocaína nos excita y estimula, pero a la vez la hoja de coca tiene una altísima concentración de calcio, que nos calma, ayuda a dormir y relaja los músculos. La naturaleza ha equilibrado químicamente a esta planta; en ella hay fuerzas antagónicas que terminan dándonos una aguda y precisa medicina. Nunca dejaremos de aprender sobre esta misteriosa hoja.
Buscando un mundo libre de narcotráfico, esperamos que el actual debate sea limpio y objetivo, y que se honre la verdad de la ciencia, la salud y la prosperidad económica de un pueblo.
El último argumento en contra de la hoja de coca es el de la presencia de oxalatos que la vuelven tóxica e impiden que se absorba su calcio. Si bien es cierto que el oxalato inhibe al calcio, no tenemos información sobre el contenido de oxalatos en la hoja de coca.
Curiosamente, la espinaca es una verdura con la más alta concentración de oxalatos y nadie ha objetado su consumo; mas aún, la sociedad lo promueve y lo tiene como un aureolado nutriente, tan solo está contraindicado su consumo en casos de cálculos renales por oxalato de calcio. Sin embargo, se asume que la hoja de coca tiene oxalatos, y se le pone la lupa de aumento en toda la prensa.
Más que los oxalatos son los fitatos, que son compuestos fosfatados, los que inhiben la asimilación de calcio. Los fitatos son la principal forma de almacenar fósforo en los tejidos vegetales; están presentes en muchas verduras verdes y su presencia inhibe la asimilación de calcio en un 20% como máximo. El alimento con mayor concentración de fitatos, o también llamado ácido fitico, es la soya con un 2,9% de su peso en seco.
En el caso de que la hoja de coca tuviera una significativa concentración de fitatos, dado su alto contenido de calcio, aún quedaríamos con el 80% restante de calcio disponible. El 80% de 2097 mg de calcio de la coca es 1677,6 mg; todavía con este fuerte descuento, aún nadie supera a la coca en concentración de calcio.
Curiosamente, los fitatos para algunos son considerados como fitonutrientes, debido a su efecto antioxidante, que puede prevenir el cáncer de colon y reduce el estrés oxidativo en el tracto intestinal. Muchos investigadores ahora razonan que el contenido de fitatos en la fibra de legumbres y granos es uno de los ingredientes responsables en la prevención del cáncer de colon.
La cocaína nos excita y estimula, pero a la vez la hoja de coca tiene una altísima concentración de calcio, que nos calma, ayuda a dormir y relaja los músculos. La naturaleza ha equilibrado químicamente a esta planta; en ella hay fuerzas antagónicas que terminan dándonos una aguda y precisa medicina. Nunca dejaremos de aprender sobre esta misteriosa hoja.
Buscando un mundo libre de narcotráfico, esperamos que el actual debate sea limpio y objetivo, y que se honre la verdad de la ciencia, la salud y la prosperidad económica de un pueblo.
Nota:
Para ampliar informacion esta disponible el libro
"Anatomia de la Hoja de Coca"
Sacha BArrio Healey
Javier Prado este 1476 ( entre pte Quinhones y Guardia Civil)
San Isidro
Lima, Peru.
Tel 2251518
...desgraciadamente la ambicion y codicia humanas pueden llevarnos a hacer y decir barbaridades sobre una planta milenaria tenida por sagrada entre una de las culturas que sigue sorprendiendo al mundo.
ResponderEliminarEntre muchas otras cosas, por sus avances en la agricultura
Lo felicito por la iniciativa que ha tenido. Me pareció interesante la forma como se abordo el tema sobre la hoja de coca así mismo la explicación que se planteó, vale además resaltar en relación a ello que la problemática del narcotráfico en el mundo, es una cuestión política y económica de la sociedad en que vivimos, la cual es manejada por los intereses de las grandes industrias farmacéuticas, alimentarias y de armas, las cuales influyen de manera solapada a través de los gobiernos.
ResponderEliminarEl transfondo de todos los problemas de la educación, la alimentación y la salud es precisamente el sistema en el vivimos, el cual busca idiotizar a las personas a través de la educación, los medios de comunicación, etc. para que así no se cuestione la realidad en la que vivimos.
Esperamos que más personas así como usted sigan realizando este tipo de literatura e investigación tan necesaria en estos tiempos. Particularmente me sumo a su causa.
Atte. Elizabeth Consuelo Ortega Romero
Estudiante de Farmacia y Bioquímica
UNMSM
Importante informacion que todo padre debe saber , a puertas de los cambios naturales ypolaridad magnetica de la tierra es necesario fortalezer al cuerpo. Alimentos naturales y energia pranica , solo asi estaremos preparados para los proximos acontecimientos, su aporte Dr. Sacha Barrio es muy importante muchas gracias . Avidanet creaperu . publicista creativo.
ResponderEliminarEsta muy bien resumida la información sobre la hoja de coca y la barbarie que existe en contra de ella...
ResponderEliminarDejame sugerirte Sacha, que actualices la información de la dirección en la que pueden encontrarte.
Abrazos,
Kiko.
Interesante para todos, esperamos que muy pronto nos des aconocer de tus nuevas investigaciones.
ResponderEliminarsaludos desde el Chivay ,
la puerta de entrada al cañón del Colca.